martes, 20 de octubre de 2015

EL PUEBLO VIEJO DE BELCHITE



En 1960 el último habitante de Belchite escribía una última frase en el pórtico de la Villa.
Fue uno de los municipios más importantes de Aragón durante la edad Moderna y uno de los más prósperos del siglo XX. Sin embargo, el 24 de Agosto de 1937 los republicanos lanzaron una ofensiva en Belchite con el objetivo de tomar Zaragoza y frenar el avance Nacional hacia el Norte. El pueblo quedó arrasado y más de 6000 personas perdieron la vida. Desde entonces se ha convertido en uno de los lugares más terroríficos de España por la multitud de fenómenos paranormales que aquí se producen.

Belchite proviene de su raíz celta Bel, que significa “bello” a la que se agregó el sufijo Sit cuya traducción es “lugar”. La unión de varias palabras forman  “Bello Lugar”
Se encuentra a 48 km de Zaragoza y tiene una extensión de 250 kilómetros cuadrados. Actualmente la población vive en el Pueblo Nuevo de Belchite, prácticamente pegado al viejo. Su población es de 1300 Belchitianos.

La razón por la que el pueblo no se derribó por completo fue porque el dictador Francisco Franco quiso mantener el Pueblo Viejo en ruinas como testimonio de la batalla en la que había salido victorioso.  Franco prometió una casa a cada uno de los sobrevivientes de la batalla de Belchite pero posteriormente el que quiso una casa tuvo que pagarla y el que no tenia dinero emigrar. Los primeros habitantes en trasladarse al pueblo nuevo en 1954 usaron las piedras de sus antiguas propiedades para construir las nuevas viviendas.

Un dato poco conocido nos dice que hasta bastantes años posteriores a la guerra, Belchite fue un campo de concentración para los españoles del bando contrario que fueron capturados en época de guerra y de postguerra. Estos prisioneros entre otras cosas fueron obligados a construir el Pueblo Nuevo. Franco nombró a Belchite: “Leal, Nombre y Heroica Villa de Belchite”

Junto a Ochate, Belchite es uno de los pueblos fantasma españoles por excelencia. Los casos de fenómenos paranormales han sido muchos. Psicofonías, sombras, ruidos extraños y luminarias se han visto desde que este pueblo quedo marcado por esta tragedia.

La zona donde más sucesos se concentran se sitúa en la Iglesia San Martin.

Su fama en cuanto a lo paranormal se basa mayormente en la cantidad de parafonias obtenidas. Una de las más impresionantes y famosas que se han grabado en Belchite es la captada por Oscar Parra, que dirigió un cortometraje en Belchite el Viejo. Él y su equipo eran completamente escépticos. Durante el rodaje en la Iglesia de San Martín, al finalizar una toma, apareció una voz de niño que les puso los pelos de punta.




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