martes, 20 de octubre de 2015

LA MUSSARA, PUEBLO MALDITO



Muchos son los coches que aparcan a orillas de un precioso lago en las montañas de Prades para visitar los restos de lo que un día fue el pueblo de La Mussara. Según los testimonios, aquí existe una piedra la cual si la saltas te conduce a Villa del 6, una especie acceso a otra dimensión. Es numerosa la cantidad de gente que ha desaparecido en este misterioso lugar, casos sin ninguna explicación publicados incluso en El Diari de Tarragona. Actualmente siguen en paradero desconocido.

La Mussara pertenece al municipio de Vilaplana, Tarragona. Aparece citada en documentos de 1173 donde consta que el pueblo estaba ya habitado. Lleva abandonada oficialmente desde 1950 por razones desconocidas aunque muchos ven en este abandono raíces paranormales.

Difícilmente encontraremos otro lugar en Tarragona con tanto misterio. A día de hoy se conservan los restos de lo que fue en su día la Iglesia y algunas casas. En la Mussara han habido avistamientos OVNIs y se han realizado varías parafonías pero lo que más llama la atención son las extrañas desapariciones ocurridas en este pueblo.

La Villa del 6 y casos de desapariciones
La Mussara tiempo atrás fue un sitio preferido de celebración de ritos satánicos y ocultistas que al parecer hoy en día se siguen practicando.
Según la leyenda popular, existe una piedra que conduce a la “Villa del 6”, un supuesto lugar en otro universo paralelo. Se pretenden así explicar los extraños fenómenos de desorientación y desapariciones reales sin ningún tipo de rastro. Además, como en Ochate, una espesa niebla envuelve el pueblo continuamente
“La gente que cree relaciona este lugar con un punto de conexión, una especie de puerta dimensional”, cuenta una vecina de Vilaplana.
CASOS
  • Un alférez fue hasta la Mussara con una amiga, y tras visitar el lugar durante unas dos horas, resulto ser que en realidad se había ausentado más de doce.
  • El 16 de octubre de 1991, cuando un grupo de amigos que iban buscando setas, se percataron que faltaba uno de ellos. Era Enrique Martínez Ortiz, se llegaron a hacer batidas por el terreno pero desapareció sin dejar rastro alguno. Se encontró su cesta con una seta en un lugar llano (próximo a la piedra de la villa del 6) y su coche aparcado en el mismo sitio con sus enseres en el interior, incluso una medicación que debía tomar.
  • En 1995, un ingeniero alemán que trabajaba por esa zona, desapareció por completo durante tres horas. Luego volvió a aparecer sin recordar nada en absoluto.

  • Un vecino desapareció para reaparecer en EEUU sin que pudiera justificar cómo había llegado allí.


0 comentarios:

Publicar un comentario